2/9/08

Vicky Cristina Barcelona ¿Qué le pasó a Woody Allen?

Me considero fan acérrimo de Woody Allen y, como tal, he albergado durante años la esperanza de que superase el bache creativo y nos brindase otra gran película. Match Point y Melinda y Melinda, aunque lejos de sus mejores obras, dieron buenas vibraciones, pero, después de ver Vicky Cristina Barcelona, me temo estos dos filmes fueron cantos de cisne en un contexto de inevitable declive. Desgraciadamente, no se aprecia en Woody Allen ninguna señal que nos diga que volverá a ser el gran cineasta que deslumbraba al mundo en cada estreno.

Y no es que Vicky Cristina Barcelona sea una mala película. La historia es buena y está rodada con oficio, pero ¿quién podría decir que se trata del mismo director que rodó Delitos y Faltas, Hannah y sus hermanas, Manhattan y tantos otros clásicos? Los personajes, aunque tienen su encanto, carecen de la profundad de otras veces, los diálogos, en otro tiempo deslumbrantes, son de lo más previsible, la romántica visión de una España de gente liberal y hedonista que se entrega a los placeres de la carne y el vino–en contraste con la puritana América-, tiene poco de real y mucho de prestado. Se puede argumentar que esto último no tiene por qué suponer un defecto. Al fin y al cabo, en algunas de sus mejores películas, Nueva York también se idealizaba. Pero se trataba de una fantasía consistente, creada por alguien que conocía el terreno que pisaba, que entendía la ciudad y sabía sacarle el partido necesario para convertirla en un personaje. Por el contrario, la España de Woody Allen es un topicazo de turista recién llegado. Ni la Barcelona de agencia de viajes, ni la casa del padre de Javier Bardem, que parece sacada de un anuncio de Espetec, tienen nada de convincente. Todo esto es una pena, porque la historia y los actores podrían haber dado para mucho más.

Uno no puede evitar preguntarse qué le pasó a este cineasta. ¿Cómo se le apago la estrella? Tras varias décadas gloriosas, se sumió en una crisis creativa. ¿Pero por qué? ¿Cuál es la razón para que alguien de una creatividad tan apabullante se quede, de pronto, sin tener nada que decir? Muchas de sus películas de esta última época parten de ideas interesantes, incluso originales, pero parecen hechas con desgana, sin ambición, de forma rutinaria.

Quizás, en cierto momento, debió levantar el pie del acelerador. No imponerse el ritmo frenético de una película por año. Dejar madurar los proyectos un poco más hasta darles más carnadura, más consistencia. Probar otros géneros, otras formas de trabajar. Adaptar alguna novela, colaborar con otros guionistas… reciclarse, vamos. El simple cambio de escenario parece un estímulo insuficiente para alguien tan encerrado en sí mismo que perdió el contacto con la realidad. En cualquier caso, siempre le estaremos agradecidos por los inolvidables momentos de cine que nos ha dejado.

9 comentarios:

Gabriel dijo...

Personalmente creo que las dos últimas grandes películas de Allen son "Poderosa Afrodita" y "Desmontando a Harry". Las películas posteriores muestran apuntes interesantes, pero por lo general el hilo que las sostiene se rompe con demasiada facilidad. Su agotamiento creativo es directamente proporcional a la edad que va alcanzando. Esto, para mí, no tiene nada de extraño: le ha pasado a infinidad de célebres figuras, incluso a los grandes genios. En realidad, cuando ese declive no sucede, se cuenta por excepcional: Wallace Stevens o John Ashbery son un ejemplo de ello en poesía. Hace mucho tiempo que debería haber dejado de ofrecernos un film por año. Tal vez eso le beneficiaría, no sé. Aún así hay dos factores de su cine más actual que creo que alejan al espectador de sus películas. Los personajes parecen vivir en otra galaxia que no tiene nada que ver con el común de los mortales: son rematadamente pijos e intelectuales. Algo que, seguro, tenía su gracia en los 70, pero que hoy día sólo puede crear rechazo en el espectador actual, ano ser que pertenezcas, claro, a esa privilegiada elite. El otro factor es el mal gusto que ha desarrollado en cuanto al cásting. Soy de la opinión que no da pie con bola. No casan con el estereotipo que tanto promulga ni de coña. Y si Scarlet tiene que ser la nueva Diane Keaton o Mia Farrow, vamos listos... De todas formas, lo cierto es que Allen no ha filmado ni una sola obra maestra en toda su carrera (algo reconocido por él, y que yo no tacharía de falsa modestia). Eso sí, haber logrado acumular tal ingente cantidad de films de calidad es toda una proeza.
Un vez leído esto, olvídalo todo.
Que yo de cine no tengo ni idea!!
Saludos amigo-

Max Vento dijo...

Sí, en lineas generales estoy de acuerdo. Creo que "Desmontando a Harry" fue una película excelente aunque no tuvo tan buena acogida. Yo me preguntaba a qué se debía el agotamiento creativo. Parece que tiene que ver mucho con el ritmo de trabajo. Sacar tanta obra no da tiempo a madurar, a absorber ideas nuevas.
Por el contrario -no dudo de que Woody sea honesto cuando dice esto- sí creo que tiene varias obras maestras. Sin duda hay un antes y un después de su enfoque cinematográfico. La cuestión es que no hay una que sobresale por encima de otras, pero sí unas cuantas que son clásicos genuinos y a mi entender obras maestras en su género, que es, el género Woody Allen. ¿Cuántos directores pueden presumir de ser un género?

misako mimoko dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Gabriel dijo...

Bueno, tal vez tiene algo que ver el ritmo de trabajo, como tú dices. Pero yo creo que en realidad todo artista tiene una serie de ciclos: eclosión, aprendizaje, madurez, etc. Si es de valía, llega al momento cumbre: ese periodo que deja boquiabiertos al resto y tal y tal. Pero sinceramente, cuenta ahora con los grandes artistas que siguen vivos en nuestros tiempos, y que ya han alcanzado cierta edad. Y cuando digo "grandes artisats", me refiero a aquellos que alcanzan un consenso general, sobre los que no hay duda por que su historia y la del género al que pertenecen dan fe de ello. Pocos, o muy pocos, han aguantado el tipo: Scorsese, Coppola, Spielberg, no sé, el que sea. Bob Dylan, Neil Young, Lou Reed (suelto nombres al tuntún) Todos tuvieron mejores tiempos. Claro que hay excepciones (Cormac McCarthy, por ejemplo). Pero ya digo, que por lo general se cuentan por excepciones. Tienes razón Allen es un género en sí mismo... O un personaje. ¿No crees que cuando él desaparece de la pantalla la películas y todos sus personajes pierden credibilidad? Son historias escritas por él y para él. Como Chinaski para Buk o Marlowe para Chandler. No sé... Reconozco que Allen dejó de intersarme hace mucho tiempo...

Max Vento dijo...

Misako
bueno, no sé cuál era el comentario porque el google lo ha borrado automáticamente. No sé si es un error o qué ha pasado... Así que si quieres pegarlo de nuevo...

Gabriel dijo...

Max, el mensaje borrado era mío. Me serví de la cuenta de M sin darme cuenta. Es que a esas horas de la matina... ya se sabe-

Max Vento dijo...

A mí no dejó de interesarme, más bien dejó de interesarme lo que ha hecho de un tiempo a esta parte.
Tienes razón en lo de los ciclos creativos: el periodo de aprendizaje, el dominio del campo, el avance creativo y el declive. Aunque no sé muy bien por qué se produce el declive. Agotamiento de ideas, pérdida de motivación, de capacidad creativa, pérdida de contacto con la realidad, los artistas se vuelven prisioneros de sus grandes obras... Es difícil de decir. Ha habido casos que no ha sido así. Will Eisner siguió dando buenas obras hasta el final, lo mismo que Hergé... La última de Kubrick me pareció excelente...

Anónimo dijo...

Pelicula mala, mala, mala "Vicky Cristina Barcelona". Fui con las espectativas que me habian vendido por radio, tv, etc. de que se mostraba una Barcelona bellisima y llena de cultura, y resultó ser PENOSA. Me dicen que está ambientada en un pueblucho de Mexico y tb me lo creo. Como dices, llena de topicazos de turista simplista. Mas bien sali con verguenza de ir a USA o cualquier otro sitio y decir q soy de Barcelona... todo el rato flamenquito, paisajes de flores y arboles, ni un solo edifici, una calle con putas tercermudistas (que si, existe, pero en fin)... mas bien creo que Woody ha hecho un flaco favor a Barcelona.

Max Vento dijo...

Anónimo:
Seguramente esta visión se corresponda con la que tienen muchos extranjeros que pasan un día o dos en Barcelona y van a los sitios que "hay que ir". El tema de las putas, me parece, es para darle algo de "realismo". Algo así como, "muestro realidad la ciudad que vive la gente". Lástima que se quede sólo en eso y el resto sea un retrato vacío y superficial.