Entrevista en Las Provincias

El diario Las Provincias me hace hoy una entrevista. Pincha aquí para verla en su contexto original.

De pequeño dibujaba en los cuadernos, en los márgenes de los libros, en cualquier papel y a cualquier hora. Está preparando la tercera entrega de Pablo Díaz-Strasser, 'Comedia en un acto', tras la exitosa 'Actor aspirante'. Vive en St. Louis (EE. UU.), donde compagina su dedicación a la viñeta con su labor como profesor de español.
25.10.10 CARMEN VELASCO

-Lo habitual es que los dibujantes vivan en la Comunitat y trabajen para editoriales de EE. UU. para poder vivir del cómic. No fue su opción...
-Generalmente, los dibujantes que viven del cómic en exclusiva hacen trabajos de encargo para grandes editoriales. Habitualmente, incluso aquí en EE. UU., quien se decanta por el cómic de autor ha de compaginarlo con otros trabajos, bien sea en ilustración, enseñanza o diseño. Hasta ahora sólo me he dedicado al cómic de autor, aunque no descarto la vía más profesional en un futuro.

-La Comunitat es cantera de ilustradores: Paco Roca, Miguel Calatayud, Daniel Torres, Salvador Larroca, Ana Juan... ¿Tiene alguna explicación?
-Valencia ha tenido tradicionalmente muy buenos dibujantes. Por ejemplo, que las editoriales valencianas en su época fueron de las más populares. No sé bien la razón. Quizá sea una tierra muy barroca, que ofrece muchos estímulos visuales. Desde luego, dibujantes no faltan. Más bien faltan lectores.

-En Estados Unidos es habitual que los adultos lean cómics o novelas gráficas; en España, no tanto. ¿Por qué aún se conciben las viñetas como cosa de niños?
-En Estados Unidos pasaba lo mismo hasta no hace tanto. En cuanto a la razón, me acuerdo de la que daba Marjane Satrapi cuando decía que el acto de dibujar -o el libro con dibujos- se asocia a la infancia. Es una buena explicación, aunque creo que incompleta. La distribución y la oferta han tenido mucho que ver en la marginación del cómic. Durante mucho tiempo la oferta fue muy limitada y estaba dirigida a niños y adolescentes. Cuando esto cambió, la distribución también lo hizo y el cómic quedó relegado a la librería especializada, un reducto de coleccionistas de difícil acceso para el comprador ocasional.

-¿Cuántos tebeos tiene en casa?
-Muchos, muchos. ¡Y quiero muchos más!

-El pasado fin de semana Valencia celebró un salón de cómic al calor de la Mostra. ¿Le invitaron?
-Me invitaron a Barcelona y no pude ir. Y desgraciadamente tampoco he podido venir a éste. ¡Estoy tan lejos de la acción!

-El protagonista de sus historias es un actor. ¿Cómo será 'Comedia en un acto'?
-Pablo Díaz-Strasser decide montárselo por su cuenta y crear un grupo de teatro propio. Escribe una obra, una comedia en un acto que narra más o menos sus vivencias, y trata de representarlas. El cómic muestra este proceso, las frustraciones y los esfuerzos para que no se vaya todo al garete, mientras trata de que sus sentimientos por una de las actrices no interfiera con el éxito de la obra.

-¿Contempla que su serie de Pablo Díaz-Strasser se transforme en una película o ficción de televisión?
-Me gustaría, porque uno no está como para decir que no a estas cosas. Aunque en caso de hacerse, quisiera estar involucrado de algún modo, sobre todo con los guiones. Que no salga nada de lo que luego me avergüence.

-¿Le gustan las adaptaciones de los cómics a las películas?
-De todo hay. La mayoría de las adaptaciones que no funcionan, suelen tener el problema de que siguen una fórmula con escenas de acción que atraigan a los chicos y algo de romance para atraer a las chicas. Y ambos elementos aparecen forzados. Creo que en este saco podríamos meter a la mayoría de las películas de superhéroes que se han hecho en los últimos años excepto las de 'Iron Man' que estaban muy bien y las de 'Batman', que estaban muy logradas. En general, una buena adaptación ha de ser respetuosa con el original y a la vez ser una obra con una personalidad propia. Es un equilibrio muy delicado. Creo que 'Ghost World' y 'American Splendor' lo lograban.

-Crear viñetas para iPhone o iPad ¿es el futuro o la traición al cómic?
-Depende. Si se respeta el lenguaje y no se meten animaciones sin sentido, sonidos y demás chorradas no tiene por qué haber problema. Sólo cambiaría el soporte. Pero si me dan a elegir, me quedo con el papel.

-El ilustrador es un profesional anónimo. Por ejemplo, el aeropuerto de Manises tiene mucho tráfico de pasajeros pero pocos saben que el mural gigantesco de la cafetería es una obra suya. ¿Es una desventaja el anonimato público?
-En general, sí es un inconveniente, pero es así.

-Usted es un eterno aspirante a....
-Sigo sintiéndome como un recién llegado en esto del cómic. Así que aspiro a situarme.

-Dígame un actor con el que se identifique...
-Creo que Ricky Gervais tiene una sensibilidad parecida a la mía. Conecto con su sentido del humor y su forma de ver la vida.

-¿Con quién quisiera tener una noche de citas?
-Gina Welch. Es una escritora joven a la que vi hace poco en una presentación.

-Si alguna vez está en un aprieto (accidente, incidente o suceso), ¿qué superhéroe le gustaría que le salvara?
-Si tuviese un problema con el coche, Maggie de 'Love & Rockets'. Para el resto, Superman, que parece un tipo eficiente y resolutivo, aunque un poco soso.

-Si pudiera elegir, en qué cómic le hubiera gustado ser un personaje o salir en una viñeta....
-Cualquier personaje que tenga superpoderes, por motivos obvios.

-¿Qué personaje de la viñeta detesta?
-A Garfield no le acabo de ver la gracia. A veces he leído alguna tira y me he preguntado: «¿Se supone que eso es un chiste?»

-El cómic es el arte de...
-Quien sabe escribir y dibujar. También de quien no sabe ni escribir ni dibujar.

-Recomiende un cómic para tratar de enganchar a un adulto al mundo de la viñeta...
-'Jimmy Corrigan', de Chris Ware, es de lo mejor que se ha hecho, aunque es una lectura un poco densa para el que empieza. Por tanto, creo que recomendaría 'Maus', de Art Spiegelman, que es bastante más accesible. O 'Persépolis', que hoy en día es muy relevante.